26/2/11

ESPERANZA.

Me he parado a pensar, he observado mis entradas antiguas y he llegado a una conclusión. Me están pareciendo aburridas y sin sentido.. Todas hablan de amor, de la imposibilidad de este, de felicidad... En general de sentimientos pero ninguna habla de la suerte. La suerte que todos tenemos, aquella que anda escondida para que no la encuentres ni la oigas pero si eres astuto, puede que esta se descuide y puedas llegar a descubrirla..
Y claro, nadie es tan tonto como para en alguna vez en su vida no tener suerte ¿no? Todo el mundo ha tenido un trocito de fortuna y felicidad alguna vez en su vida. Yo puedo decir que me ha sonreído la vida siempre,desde que era pequeña, no encuentro nada que deje que me hunda. En realidad no creo que debamos quejarnos, creo que el simple hecho de tener salud, ya es tener suerte, ya es un milagro, ya es poder contar a tus hijos, a tus nietos.. las miles de hazañas que nos ocurren día tras día desde que abrimos los ojos, bajamos con el pie derecho y andamos hacia el aseo.. Por eso después de enrollarme tanto, os digo que no os paréis a pensar en lo que no tenéis sino en lo que tenéis y verdaderamente os hace felices.
Así que así , introduciendo un poco, hoy quería hablar de la gente que ya no está con nosotros, de aquellos ángeles caídos que nos acompañan en forma de estrella, nuestros guías indirectos en nuestro día a día. Porque hasta en este tema, hemos de ser positivos. Sabemos que esa persona está ahí, nos cuida, nos protege, se alegra cuando estamos bien y se pone triste cuando no lo estamos tanto. Porque no puedo dejar de pensar en aquellas muertes injustas, aquellas por accidentes de tráfico, cánceres, enfermedades contagiosas y un largo etcétera.. Por eso, por todas aquellas muertes injustas, debemos sonreír, mostrar felicidad ante las adversidades, luchar, luchar y luchar hasta que nuestro aliento se consuma.. Y es que nosotros lo pasamos mal pero ellos, al final de sus días tienen la sensación de estar ahogándose, de faltarles el aire y cuando ya parece que tienen la esperanza de salir hacia delante, una luz blanca les hace entrecerrar los ojos y llega ella, con su traje negro entre la luz blanca para invitarlos a pasear por ese largo túnel donde les vienen a la cabeza todas las imágenes de su vida. Muchos de ellos logran regresar y superarlo pero otros cruzan el túnel y no llegamos a despedirnos de ellos...
Al final lo único que nos queda es pensar en positivo, reír a carcajadas, disfrutar de la vida, mirar a nuestra más brillante y lejana estrella cada noche y pensar que están ahí , que nos cuidan, nos miman, nos protegen y debemos luchar por cada una de esas almas que algún día estaban aquí y que ahora velan ahí arriba por cada uno de nosotros.

2 comentarios:

  1. dios mi niña... es preciosa... que emocionada me has dejado :(

    nunca cambies mi niña, te quiero mucho

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